El Manchester City recuperó su mejor versión justo a tiempo, y lo hizo con una contundente victoria de 5-2 sobre la Juventus en la última jornada de la fase de grupos. El regreso de Rodri fue clave para que el equipo de Pep Guardiola volviera a mostrar orden, control y pegada. Con el mediocampista español en el campo, los “citizens” dominaron el juego y aseguraron el liderato del grupo, dejando a los italianos en el lado más complicado del cuadro.
Rodri fue el corazón del equipo, conectando con Reijnders para mover los hilos desde el mediocampo y llevando al City al borde del área rival con claridad. También destacó Aït Nouri, que con apenas dos partidos ya entendió el estilo de Guardiola y asistió a Doku en uno de los goles. El City se mostró peligroso desde el inicio, aunque un error de Ederson permitió el empate momentáneo de Koopmeiners.
Lejos de desmoronarse, el equipo inglés mantuvo su estilo y volvió a tomar ventaja con una jugada entre Savinho y Matheus Nunes, que terminó en un autogol de Kalulu. El 3-1 abrió la puerta al dominio total del City, que siguió atacando pese a algunas intervenciones destacadas del arquero italiano Di Gregorio.
En la recta final, Haaland ingresó desde el banquillo y no tardó en aparecer, empujando un centro de Nunes para el 4-1. La Juventus descontó una vez más, pero Reijnders coronó su gran actuación con un gol sobre el cierre para sellar el 5-2 definitivo. Con Rodri como eje, el Manchester City vuelve a ilusionar a su afición en la Champions.