Lo que parecía un amistoso tranquilo en Las Vegas entre equipos estadounidenses y el América de México se tornó en un duelo más intenso cuando Lionel Messi marcó un gol al minuto 33.
El tanto, que significó el empate momentáneo 1-1, surgió de un error de Sebastián Cáceres, que Luis Suárez aprovechó para enviar un centro preciso hacia Messi. El argentino conectó de cabeza para vencer al arquero americanista y empatar el partido, pero fue su reacción tras el gol lo que acaparó todas las miradas.
El festejo de Messi generó diversas interpretaciones entre los aficionados. Inicialmente, mostró su característico número 10, pero después realizó gestos con los dedos que han sido motivo de debate.
Algunos interpretaron las señas como una referencia al triunfo de Argentina por 2-0 sobre México en el Mundial de Qatar 2022, mientras que otros lo vieron como una alusión a las tres estrellas de campeón mundial que adornan la camiseta argentina.
Estas acciones elevaron las tensiones entre el jugador y la hinchada americanista ubicada detrás del arco donde se marcó el gol.
La reacción de Messi, poco habitual en partidos de exhibición, reflejó la influencia que la afición tuvo en el desarrollo del juego.
Se presume que los cánticos y provocaciones previas de los seguidores azulcremas impactaron al astro argentino, quien respondió con gestos cargados de simbolismo. Esto demostró que, incluso en encuentros amistosos, el ambiente puede alcanzar niveles de rivalidad dignos de una competencia oficial.