La red ferroviaria de París sufrió un ataque masivo a pocas horas de la inauguración de los Juegos Olímpicos, con incendios deliberados en líneas de alta velocidad que han afectado a 800.000 viajeros.
Los ataques han ocurrido en las líneas que conectan París con el oeste, el norte y el este, causando importantes perturbaciones en el tráfico ferroviario.
La Fiscalía de París y los servicios secretos están investigando el ataque, que se considera un acto criminal coordinado.
Se busca determinar la causa y los responsables de este sabotaje que ha causado retrasos y cancelaciones de trenes. Los ataques consistieron en incendios provocados de forma coordinada en conductos de cables de alimentación de la señalización y de comunicaciones.
El disturbio ha afectado a los viajeros que se dirigían a París para la inauguración de los Juegos Olímpicos, causando inconvenientes y molestias. La situación es crítica, y las autoridades están trabajando para restablecer el servicio ferroviario lo antes posible.
El primer ministro francés, Gabriel Attal, ha condenado el ataque, calificándolo de “acto criminal” que “pondrá en peligro” la salida de vacaciones de muchos franceses. Las autoridades están tomando medidas para garantizar la seguridad y el funcionamiento del transporte público en la capital francesa.