España derrota a Inglaterra y es campeón de la Euro 2024

En una muestra de fe y determinación, España logró imponerse a Inglaterra en la final de la Eurocopa, volviendo a levantar el trofeo doce años después de su última victoria. A pesar de la lesión de su líder, Rodri, el equipo español golpeó primero con un gol de Nico Williams. Inglaterra igualó el marcador gracias a Palmer, pero el gol soñado de Mikel Oyarzabal aseguró la victoria para España, que se convierte en la única selección en ganar cuatro ediciones de la Eurocopa.

Más allá de la victoria en la final, España ya había ganado al volver a conectar al país con su selección, despertando el mismo orgullo que se vivió durante la gloriosa etapa entre 2008 y 2012. La conquista de la Liga de Naciones, seguida por esta Eurocopa, sitúa a la nueva generación en un camino de éxito que parecía impensable hace unos años.

La lesión de Rodri presentó un reto significativo, pero el equipo, con extremos como Yamal y Nico, y jugadores claves como Carvajal y Morata, mostró su capacidad de adaptarse y superar cualquier desafío. Dani Olmo fue crucial en evitar un empate en su área, y la fortaleza mental del equipo se hizo evidente en la segunda mitad del partido.

Gareth Southgate, aunque nuevamente finalista, no logró llevar a Inglaterra a la victoria. Su equipo, agotado por una larga temporada y desgastado por dos prórrogas y penaltis en rondas anteriores, no pudo igualar la intensidad española. La fortaleza defensiva de Inglaterra y su capacidad para castigar errores mantuvieron el partido tenso, pero finalmente, España supo competir y prevalecer.

España demostró su capacidad para derrotar a cada campeón del mundo con convicción en su fútbol. La final contra Inglaterra fue una prueba de paciencia y adaptación, y aunque el primer tiempo fue complicado, el equipo se reagrupó y encontró su ritmo en la segunda mitad.

La precisión de Nico Williams y el liderazgo de Zubimendi tras la salida de Rodri fueron esenciales. La electricidad de Yamal, máximo asistente del torneo, y la tenacidad de Olmo y Morata crearon oportunidades claves. Inglaterra, pese a sus intentos, no pudo contener la energía renovada de España.

El gol final de Oyarzabal, asistido por Cucurella, selló la victoria y permitió a España abrazar la gloria una vez más. Los intentos finales de Inglaterra fueron repelidos con éxito, y el equipo español, bajo la dirección de Luis de la Fuente, celebró una victoria que marca el comienzo de una nueva era dorada para el fútbol español.