La saga de “Capitán Tsubasa”, conocida en México como Supercampeones, una de las series de manga y anime de fútbol más icónicas de todos los tiempos, tiene su origen en la inspiradora historia de Musashi Mizushima, el primer futbolista japonés en debutar en el fútbol profesional brasileño durante la década de los 80.
Su legado abrió el camino para futuros talentos japoneses como Kazu Miura, Masakiyo Maezono y Tomo Sugawara en la década de los 90.
La conmovedora historia de Musashi comenzó en 1975, cuando, a la edad de 11 años, llegó a Brasil siguiendo la recomendación de la leyenda del fútbol Pelé.
Su objetivo era encontrar su lugar en el mundo del fútbol brasileño, y su valiente travesía sirvió como fuente de inspiración para el creador del manga “Capitán Tsubasa”, Yōichi Takahashi.
Takahashi afirmó que la experiencia de Musashi en el São Paulo FC influyó significativamente en la creación del personaje principal de su obra, conocido como “Tsubasa Ozora”, en la versión japonesa y Oliver Atom en la versión de Latinoamérica. En la trama, Musashi, apodado “Alas de Ícaro,” comparte su nombre con el famoso samurái de la historia japonesa, Miyamoto Musashi. La rivalidad ficticia de Tsubasa con un jugador llamado Kōjirō Hyūga es un homenaje a la rivalidad histórica entre Miyamoto Musashi y Sasaki Kōjirō.
La franquicia “Capitán Tsubasa” continuó su legado con la tercera serie, titulada “Captain Tsubasa ROAD TO 2002”, que se lanzó en 2001. En esta serie, el personaje Oliver Atom deja el São Paulo FC después de una actuación destacada y se traslada a España para unirse al FC Barcelona. La historia concluye con la selección japonesa sorprendiendo al mundo en la Copa del Mundo de 2002, que se celebró en Japón.