El partido de futbol que desató una guerra
Por: admin | 7 agosto, 2023
Corazón 3.0/ Ariel Mendoza
El 13 de mayo de 1990 se enfrentaban el Estrella Roja de Belgrado, contra el Dinamo de Zagreb de Croacia en el Maksimir de Zagreb, un clásico que tenía ingredientes extra debido a la fuerte tensión política y social que se vivía en Yugoslavia por aquella época.
El país estaba conformado por seis repúblicas: Bosnia Herzegovina, Croacia, Eslovenia, Macedonia, Montenegro y Serbia, además de dos provincias autónomas: Kosovo y Voivodina; con el ingrediente extra que debían convivir católicos, ortodoxos y protestantes en una misma denominación geográfica.
Siete días antes de haberse celebrado el encuentro de futbol, se llevaron a cabo elecciones multipartidistas, en las que la Unión Democrática Croata logró el triunfo, favoreciendo la independencia. Sin embargo, el líder serbio Slobodan Milosevic tenía planes de seguir manteniendo el sistema comunista en toda Yugoslavia.
Algunos cronistas relatan que el Estadio Maksimir temblaba debido al incesante ruido que provenía de los ultras de ambos equipos. Mientras los croatas coreaban su himno, los serbios respondían con Old topole, do topole, una canción de guerrilleros serbios anticroatas.
La grada sur del estadio era una batalla campal, en donde cientos de serbios liderados por Zelijko Raznatovic, mejor conocido por Arkan, quien posteriormente sería un líder militar acusado por cientos de crímenes de guerra golpeaban a los croatas que trataban de huir asustados.
Los aficionados rompieron la reja de contención y saltaron al campo de juego, un policía serbio no dejaba de golpear a un aficionado croata, cuando Zvonimir Boban, jugador del Dinamo de Zagreb se lanzó contra el agente acertando una de las patadas más famosas dentro del futbol en la historia y mandando al policía por los suelos.
“Dentro de mí sentía la energía de lo que pasaba, e iba a explotar si no lo sacaba. Retrocedí, tomé carrera y me volví a lanzar… le di una patada al policía que cayó de espaldas, sorprendido por mi ataque”, declaró Boban que posteriormente sería un ídolo del futbol mundial con el AC Milán.
El encuentro de futbol fue un preludio de la guerra, donde el grupo de ultras serbios llamados ‘Delije’ y los croatas denominados ‘Bad Blue Boys’ tomarían los fusiles y partirían al frente para nunca regresar.
Una placa en el Estadio Maksimir tiene grabado en letras la siguiente dedicatoria: “Para los seguidores del equipo, que comenzaron la guerra con Serbia en este estadio el 13 de mayo de 1990”.